El grupo Addoha de Marruecos, el gigante de la construcción del país magrebí, ha firmado un protocolo con el gobierno de Costa de Marfil para edificar 2.600 viviendas a través de una alianza que pasa por la creación de una franquicia mixta que se hará cargo de la realización y ejecución de los proyectos, según Anas Sefriou, consejero delegado de la empresa. El compromiso fue formalizado después de la visita de trabajo realizada recientemente por la ministra del ramo marfileña, Niale Kaba, a Rabat.
La representante del ejecutivo de Costa de Marfil tuvo ocasión de comprobar en su viaje a la capital del reino alauita, según ella, «los esfuerzos y avances realizados por los marroquíes en el ámbito de la vivienda social», informa el grupo en un comunicado de prensa.
Kaba señala además que «Addoha ha expresado su interés por invertir en el sector inmobiliario en Costa de Marfil, con el beneficio de su experiencia y el know-how en este sector de la construcción», mientras que Sefriouprecisa, afirma la nota, que «no se trata de una simple inversión, sino un planteamiento manifiesto de beneficiar con nuestra experiencia a los países de África Occidental, que son nuestros amigos” .
El comunicado asegura que Addoha ofrece en su proceso de producción sistematizado muchas ventajas para la edificación programada, si bien su herramienta más popular es la ventanilla única, que acompaña al comprador con apoyos de acceso al crédito, en colaboración con los bancos locales, aunque este aspecto está contemplado también en el memorando de entendimiento firmado con el Ministerio de Promoción de la Vivienda marfileño. «El acuerdo refleja el deseo de impulsar la cooperación entre la República de Costa de Marfil y el Reino de Marruecos y es parte de la política de cooperación Sur-Sur iniciada por nuestros dos países», señala, en última instancia, Niale Kaba.
Esta inversión en el estado subsahariano no es la primera, pues Addoha inició en noviembre de 2011 los preparativos para la construcción de una planta de cemento en Abiyán, la capital económica del país, que se estima desarrollará una capacidad de producción de 500 mil toneladas de cemento al año.